¿Tu puerta automática hace ruido? Cómo identificar si el calor está afectando su funcionamiento

El verano trae consigo más horas de sol, altas temperaturas… y en algunos casos, ruidos inesperados en tu puerta automática. ¿Te ha pasado que al abrir o cerrar notas un chirrido metálico, un golpe seco o un movimiento más brusco de lo normal? Es posible que el calor esté detrás de todo esto.



En Obermatic, sabemos que los cambios de temperatura afectan a los materiales y mecanismos de las puertas automáticas. La dilatación del metal, la evaporación de lubricantes o el sobrecalentamiento del motor pueden derivar en ruidos molestos o incluso en fallos de funcionamiento si no se corrigen a tiempo.

Algunas señales de alerta:

• Chirridos persistentes al abrir o cerrar.
• Movimientos más lentos o entrecortados.
• Golpes al llegar a los topes.
• Vibraciones inusuales en el motor o guías.

Aunque a veces parezcan “sonidos normales del uso”, en muchos casos son una advertencia temprana de que algo necesita revisión.

Nuestra recomendación es clara: no ignores el ruido. Un mantenimiento preventivo en esta época del año puede evitar averías mayores y alargar la vida útil de tu instalación.

Si tu puerta habla, escúchala. En Obermatic te ayudamos a que vuelva a funcionar como el primer día.
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